“Después de todo, es la narración personal, la historia que nos contamos a nosotros mismos, la que le da un frágil sentido a todo.”
Olivia Teroba, Un lugar seguro
A veces llegamos a libros o escritoras por mera coincidencia, así me pasó con Olivia Teroba. Había visto uno de sus libros, Respirar bajo el agua, en recomendaciones de libros escritos por mexicanas, hace ya tiempo; lo guardé para leerlo algún día, pero hasta la fecha, año 2024, no he podido hacerlo. Sin embargo, pude leer Un lugar seguro y no solo eso, entrevistarla durante la Feria Internacional del libro en Guadalajara.
Al leer el libro me resonó en mis pensamientos como si estuviera escuchándome de alguna forma a través de sus palabras. Lo leía y sentía como si estuviera encontrándome conmigo, con mi búsqueda y mis cuestionamientos sobre los lugares donde he estado y el camino recorrido que me ha permitido ser la mujer que ahora soy.
Vi llegar a Olivia Teroba al stand de Sexto Piso, donde fue nuestra reunión. Ella estaba tan calmada y yo tan en nerviosa, pero nos presentamos y comenzamos a platicar.
Michelle Vázquez: ¿Cómo fue tu camino para llegar a escribir este libro?
Olivia Teroba: Me preguntaba mi lugar en el mundo de la escritura, lo que intento hacer en este libro es entender las cosas cotidianas que me molestan y el trasfondo que tienen también. Este libro está volcado hacia la interioridad, habla de amistad, feminismo, la violencia y busco escenarios de lugares habitables.
MV: ¿En qué momento sientes una incomodidad en tu vida para buscar un lugar seguro?
OT: Yo soy una persona muy quejumbrosa. Suelo fijarme mucho en las cosas que me causan malestar. Creo que eso es parte de mi personalidad. También una forma de incitarme a escribir, a preguntarme por qué no estoy de acuerdo. O por qué algo no me parece bien. En el libro y en mi propia escritura en general hay un espíritu muy adolescente que tiene que ver con esto de no estar conforme. En realidad, el mundo no es como quisiéramos. Y creo que a veces nos acostumbramos tanto a su forma de ser que ya no lo expresamos o damos por sentado que va a ser de otra manera.
MV: En Un lugar seguro mencionas varias separaciones que has tenido a lo largo de tu vida. ¿Es necesario la separación al ir creciendo?
OT: Creo que es importante aprender a soltar en general. Y no solo personas sino también ideas. Porque a veces eso es lo que pasa cuando perdemos una relación. Lo que realmente perdemos es la idea que teníamos de esa relación. E incluso a veces perdemos la idea que tenemos de nosotras mismas. Y entonces pensar que eso es algo que puede cambiar creo que sí implica cierta postura del pensamiento como mucho más abierta.
En el libro y en mi propia escritura en general hay un espíritu muy adolescente que tiene que ver con esto de no estar conforme.
Olivia Teroba
MV: ¿Tú de alguna forma te has encontrado en este libro?
OT: Sí, totalmente. Al final yo lo escribí y está escrito desde mi voz.
MV: Es muy vulnerable porque sí expones mucho la emoción de lo que viviste, te permites ser vulnerable a través de él y pienso que una vez liberas esa vulnerabilidad ya no hay algo que pueda afectarte. ¿Escribirlo fue probablemente una terapia para ti?
OT: Yo no creo que la escritura pueda funcionar como terapia. Si bien hay cierto tono de desahogo, en realidad hay mucho trabajo literario de por medio. Y creo que también mostrarnos vulnerables es un tipo de fortaleza. Pero más allá de deshacernos de los problemas es confesar que están ahí y que todos los tenemos.
MV: ¿Nos podríamos sentir identificadas con tus historias al leer Un lugar seguro?
OT: Creo que en el sentido en el que todos somos personas y tenemos y usamos un lenguaje hablado, un lenguaje que nos permite ser más amables, que vivimos en una sociedad muy parecida, creo que esos lenguajes tienen limitaciones muy parecidas. Y ahí es donde puede existir esa identificación.
Mostrarnos vulnerables es un tipo de fortaleza. Pero más allá de deshacernos de los problemas es confesar que están ahí y que todos los tenemos.
Olivia Teroba
MV: ¿Cuál fue tu objetivo al haber escrito este libro?
OT: Para mí lo más importante es tomar la palabra. En un entorno donde regularmente parece que no hay gente. Regularmente parece que no podemos hacerlo. Donde se nos ha enseñado, sobre todo por género, a guardar silencio. Entonces en este libro lo que yo intento es tomar la palabra. Y que el mismo libro es una invitación para que otras personas tomen la palabra.
MV: ¿Qué significa actualmente para ti tu libro?
OT: Me parece que es un punto de partida para mis siguientes publicaciones, es una escritura que invita al diálogo. También es un libro que intenta abrir nuevos caminos de pensamiento y que espero trace para mí misma una ruta a seguir para nuevos escritos.
MV: ¿Seguirás escribiendo ensayos, cuentos?
OT: Tengo varios ensayos publicados después de este libro, quisiera hacer una compilación sobre ellos. Aunque ahora estoy más concentrada en una novela.
MV: ¿Y qué mensaje darías a quienes todavía siguen buscando un lugar en el mundo?
OT: Creo que muchos nos encontramos en esa posición. En algún momento de nuestras vidas. Eso va y viene. Finalmente, las búsquedas interiores y personales no terminan nunca. Podemos pasar toda la vida conociéndonos a nosotros mismos, creo que lo más importante para ir haciendo estas búsquedas interiores es la paciencia y el cuidado.
Al final… Yo creo que lo único que identifico como un lugar seguro en el libro son las relaciones con las personas más allá del lugar físico. En cualquier lugar lo que nos sostienen son nuestros vínculos.
Se nos ha enseñado, sobre todo por género, a guardar silencio. Entonces en este libro lo que yo intento es tomar la palabra. Y que el mismo libro es una invitación para que otras personas tomen la palabra.
Oliva Teroba
¿Quién es Olivia Teroba?
Olivia Teroba nació en Tlaxcala, México, en 1998. Es una de las escritoras mexicanas actuales más reconocidas. Ha ganado diversos premios nacionales como el Premio Beatriz Espejo y el Salvador Gallardo Dávalos. Su obra más conocida es el libro de ensayos Un lugar seguro, pero también escribe cuento y novela. Estudió en Puebla y Ciudad de México. Si quieres conocer un poco más de su escritura, puedes leer el texto de sala que escribió para la exposición La antigua mujer-piedra, de la pintora Mónica Figueroa.
