Han pasado dos décadas desde la carrera de Micah P. Hinson (Memphis, Tennessee, 1891) comenzó. En sus inicios, recibió mucha atención tanto por su música como por su pasado, que respondía al ideal del artista maldito: historias de juventud que incluían encarcelamientos, excesos y tormentos que contaba en sus canciones. Actualmente vive en España, un país que lo ha acogido durante muchos años y que le ha permitido explorar nuevos horizontes artísticos y personales. En diciembre de 2022 Micah lanzó su undécimo álbum de estudio I Lie To You a través de Ponderosa Records, un sello italiano que además de producirlo, se ha encargado de llevarlo a concretar su primera visita a México, y en ese contexto, pudimos conversar con él antes de sus presentaciones en Guadalajara y Ciudad de México. Dueño de una estética inconfundible: sombrero, lentes de pasta y un cigarrillo siempre en entre sus dedos, Micah es un conversador muy generoso que se detiene a pensar (de verdad) cada una de las respuestas en esta charla en la que habla sobre su vida, su música, los problemas que enfrentamos como sociedad, así como su relación con el lenguaje y sus raíces Chickasaw.
Omar Muñoz: ¿En que momento de tu vida te encuentras en este momento? Micah P. Hinson: Hombre, ¿cómo empezar? Fui criado en Texas y bajo las ideas del cristianismo y el capitalismo. Esta loca idea del sueño americano y siento que por mucho tiempo mi vida se dirigió hacia allí. Terminé teniendo una carrera, luego tuve una esposa, luego tuve un maldito hogar y luego tuve hijos y todas estas cosas. Y ahora siento que estoy en un punto de mi vida en el que me he dado cuenta de que muchas de las ideas en las que fui criado son en realidad mentiras. Recientemente terminé un divorcio muy violento y litigioso que tomó unos tres años, y tengo cuatro hijos atrapados en medio de eso. Estoy viviendo en Madrid y con esta nueva luz en mi vida, me di cuenta de que no estoy tan interesado en estar en los Estados Unidos como solía estarlo. Estoy tratando de encontrar una nueva forma en mi música, en lugar de escribir siempre sobre el pasado y cosas de las que me arrepiento. Así que, en respuesta a tu pregunta, estoy en un lugar en el que estoy tratando de encontrar una nueva forma.
Estoy tratando de encontrar una nueva forma en mi música, en lugar de escribir siempre sobre el pasado y cosas de las que me arrepiento.
OM: ¿Crees que todavía hay una conexión con tu pasado como artista o prefieres encontrar nuevos caminos para ti? MPH: Bueno, quiero decir, creo que hablé de esto en algunas entrevistas para mi disco anterior. Hace casi veinte años la gente comenzó a hablar de mí y de mi pasado accidentado. Las historias sobre mí en la cárcel, arrestos, problemas con las mujeres y las drogas. Entiendo por qué estas historias eran importantes en ese momento. Como un compositor nacido en Memphis y criado en Texas, escribir canciones con el corazón roto encajaba en ciertas expectativas. Pero al final, creo que esas visiones no ganaron. Descubrí que puedo ser feliz y disfrutar de la vida, además de reflejar experiencias previas y nuevas en mi música. Durante los casi veinte años que tiene sobre los escenarios (su primer disco, Micah P. Hinson and the Gospel of Progress, se dio a conocer en 2004) ha vivido a medio camino entre Texas, donde vive su familia y una tierra con la que mantiene una relación especial, y Europa, donde ha dedicado largas temporadas a presentarse, componer y trabajar. La pandemia de 2020 lo sorprendió en Madrid, donde tomó trabajos como empleado en una pizzería por las mañanas y un videoclub por las noches mientras intentaba encontrar una nueva disquera que apreciara mejor su música o un editor que no intentase obligarlo a seguir escribiendo historias de corte beatnik para complacer al mercado editorial. OM: ¿Cómo ha influido la geografía en tu música y tu carrera? MPH: La geografía ha sido un factor importante. Vivir en Texas durante años mientras tocaba principalmente en Europa creó una especie de doble identidad. La gente tenía esta imagen de mí como un personaje al otro lado del océano, pero en Texas era simplemente yo mismo. Nunca seré un gran artista en el sentido tradicional, pero eso es interesante en sí mismo. La prensa y las críticas dejaron de importarme tanto. Ha sido fascinante ver cómo mi vida y mi carrera han evolucionado en los últimos veinte años.
En su disco más reciente, I Lie to You, impregnando sus letras crudas y poéticas de folk con inspiración tomada de la música industrial y alternativa de su juventud, Hinson también trabaja por primera vez con un colaborador externo: Alessandro “Asso” Stefana, con sede en Italia (conocido por su trabajo con PJ Harvey y Mike Patton). MPH: Claro, puedo contarte sobre Ponderosa y la influencia y apoyo que me han brindado, no solo en la producción del disco, sino también en esta gira. Ha sido en verdad fascinante trabajar con estos italianos. Al principio, cuando estábamos negociando el contrato, era un proceso complejo. Parecía que ellos serían los dueños de las grabaciones y tendrían un control diferente al que había tenido en el pasado. Siempre había querido conservar la propiedad de mis grabaciones al menos para el futuro. Sin embargo, cuando firmé con ellos, financiaron la grabación y organizaron algunos conciertos para que pudiéramos conocernos mejor. Fue una gran oportunidad para conocernos y para que mi nuevo agente y mi sello discográfico se involucrasen más conmigo. Debo decir que (en la primera parte de la gira) no obtuvieron dinero por ello, pero aprendimos a trabajar juntos. Así que al principio fue un asunto de negocios, y estaba nervioso por entregar todo a alguien, pero al final, no quiero sonar cliché, pero han sido lo que necesitaba. Siempre he sentido que los necesitaba, y lo cierto es que sí los necesitaba. Por ejemplo, estaba tocando en un festival en el sur de España y debía volver a Italia para grabar, pero el productor con el que estaba trabajando no estaba disponible debido a algunos compromisos de conciertos. Entonces, me comuniqué con ellos y les pregunté si sería posible organizar vuelos desde Nápoles a Sicilia, luego de Sicilia a Milán, y finalmente de Milán a Madrid. Aceptaron de inmediato, y una hora después, tenía todos los boletos listos. Fue sorprendente cómo estaban dispuestos a ayudarme de esa manera. Sabían que estaba en el país y estaban dispuestos a apoyarme en cualquier forma posible. Fue un alivio y una muestra del apoyo constante que he recibido de ellos durante estos años.
Hinson cuenta historias (sobre el pasado, sobre la nostalgia, sobre corazones rotos) y eso es algo que le ha ganado un público muy fiel. Pero algo importante en sus canciones es que reflejan también sus preocupaciones respecto a la sociedad: los valores cristianos, el capitalismo, la desigualdad rampante. Sobre la pregunta de qué es lo que más le preocupa sobre la sociedad en la que vivimos, el músico comenta: MPH: La sociedad actual es un lugar extraño, ¿no? Estamos rodeados de capitalismo y tecnología en todos los aspectos de nuestras vidas. Tu pregunta es importante, aunque no sea fácil de responder. Creo que debemos prestar más atención a cómo manejamos el dinero. En el fondo, me preocupa por qué tanta gente en el mundo sufre y muere debido a algo que creamos como sociedad: el dinero y su funcionamiento. Financiamos proyectos como viajes espaciales mientras tantos siguen sufriendo. Es un recordatorio de que como sociedad, hemos creado y sostenemos este sistema económico, pero también tenemos el poder de cambiarlo. Espero que, como raza humana, seamos más fuertes que los problemas que hemos creado. A pesar de todas las desigualdades y dificultades, espero que encontremos la voluntad y la fuerza para hacer lo correcto cuando sea necesario. La humanidad tiene que darse cuenta de que ya es suficiente y que es hora de abordar asuntos serios de manera seria. A veces, mirando a nuestro alrededor, puede parecer que estamos en tiempos extraños, pero también tenemos la capacidad de cambiar las cosas para mejor. Es un desafío, pero uno que espero que podamos superar.
La cultura y el lenguaje en la música de Micah P. Hinson
A pesar de que sus composiciones son todas en inglés y que guarda todavía alguna reserva para comunicarse o más aún, escribir letras en español, su manera de relacionarse con otras culturas y reafirmar sus raíces Chickasaw también ocupan espacio en su pensamiento. MPH: El tema del lenguaje es fascinante. Cuando empecé a venir a España, la gente siempre me preguntaba sobre la importancia del lenguaje en mi música, dado que gran parte de mi audiencia habla un idioma diferente al mío. Solía responder que la música es un lenguaje universal y que la gente no necesita entender las palabras exactas para sentir lo que estoy expresando. Pero luego me di cuenta de que esta respuesta era simplista y racialmente insensible. Me di cuenta de que para muchos españoles, mi música representaba una especie de reparación histórica. Ellos fueron los primeros en encontrarse con mi pueblo, los Chickasaw, y nos enseñaron sobre Jesucristo, el dinero y otros conceptos modernos. Mi relación con el lenguaje es complicada. Fui criado en Texas, donde el español era parte de la cultura, pero no lo adopté. Luego viví en España con mi novia colombiana y comencé a apreciar el poder del lenguaje de una manera completamente nueva.
Mi relación con el lenguaje es complicada. Fui criado en Texas, donde el español era parte de la cultura, pero no lo adopté.
Anteriormente estuvo trabajando con su hermano, quien es doctor en estudios americanos, para hacer un EP con canciones cantadas en el idioma original de su tribu. MPH: En cuanto a mi hermano, él está haciendo un trabajo increíble en la preservación del idioma Chickasaw. Nuestra gente es de Mississippi y Arkansas, y él se dio cuenta de que el idioma Chickasaw estaba en peligro de desaparecer. Dejó de lado su carrera artística para aprender y enseñar el idioma. Estableció escuelas de inmersión total donde los estudiantes sólo aprenden en Chickasaw. Actualizó el diccionario y se ha convertido en un defensor importante de nuestra lengua. Es impresionante cómo está contribuyendo a mantener viva nuestra herencia lingüística. Respecto a la vida en la reserva, es importante entender que no es como muchos imaginan. No es un desierto vallado, sino una tierra que compartimos con otros. Las leyes de Chickasaw pueden diferir de las leyes estatales y federales, lo que crea ciertas particularidades. Hay beneficios como la atención médica gratuita y el apoyo financiero para la educación de nuestros hijos, pero la vida en la reserva tiene sus desafíos y complejidades. En última instancia, mi relación con el lenguaje y la cultura Chickasaw es una parte importante de quién soy y cómo me conecto con el mundo.
Su primera visita a México
Para cualquiera que aprecie el folk, el country o, en realidad, cualquier expresión artística en estado puro, la visita de Micah P. Hinson a tierras mexicanas es una oportunidad invaluable. Tras un puñado de discos en su haber y una carrera que si bien se ha mantenido fuera del mainstream y una agobiante industria, no puede sino calificarse de exitosa, surge la pregunta: ¿por qué no se había presentado nunca en México?
MPH: Bueno, en realidad, estuve en Europa desde hace unos veinte años, y eso me llevó a enfocarme más en tocar allí. El dinero tenía un valor más alto en comparación con el dólar, lo que hizo que fuera más rentable. Nunca fui alguien obsesionado con ganar dinero o tener una gran carrera, pero poder mantenerme y no preocuparme por las facturas era importante. En cuanto a México, siempre fue un lugar al que quise ir. Me crié en Texas, y siempre tuve la curiosidad de explorar el sur, llegar incluso a Australia, Asia y otras partes del mundo. Pero, por alguna razón, las oportunidades para tocar en México nunca se materializaron. Es una especie de vergüenza para mí, considerando mi cercanía geográfica. Ahora que finalmente se está concretando, estoy emocionado por la perspectiva de tocar en México y conectar con nuevos públicos.
Nunca fui alguien obsesionado con ganar dinero o tener una gran carrera, pero poder mantenerme y no preocuparme por las facturas era importante.
En un mundo en el que las playlist, la cantidad de reproducciones en las plataformas de streaming y en general una constante lucha por la atención y los likes, Micah ha aprendido a encontrar su lugar al margen. Incluso, a buscar cosas que le signifiquen la posibilidad de ser feliz. MPH: Respecto a mi sueño como artista, no se trata tanto de números o éxito convencional. Más que nada, sueño con poder vivir el resto de mis días sin preocuparme por las necesidades básicas. Quiero despertar cada día sabiendo que mis hijos están seguros y atendidos, y que no tengo que preocuparme por cosas como facturas de electricidad o alimentos. Eso sería un sueño realizado. No se trata de construir algo más grande o más pequeño, sino de encontrar la paz y la seguridad en la vida cotidiana. El capitalismo a menudo nos hace soñar con cosas tan simples como eso, y es una realidad triste. Además, he tenido la oportunidad de viajar y estudiar los efectos del capitalismo en diferentes lugares del mundo. He visto cómo choca con sociedades que tienen sus propias formas de vida y culturas arraigadas. Es una experiencia reveladora que me ha enseñado mucho. Espero que, con el tiempo, pueda compartir esos conocimientos y perspectivas con mis hijos y las generaciones futuras. Nuestro mundo es realmente interesante y complejo, y estamos aquí para aprender y entenderlo de la mejor manera posible.
Quiero despertar cada día sabiendo que mis hijos están seguros y atendidos, y que no tengo que preocuparme por cosas como facturas de electricidad o alimentos. Eso sería un sueño realizado.
Los autores que lo han inspirado y sus libros publicados
Mientras enciende un cigarrillo (y otro y otro…), hablamos también sobre libros. Le pregunté cuáles fueron los autores que lo marcaron y que siguen inspirándolo. MPH: Cuando era mucho más joven, el escritor que más me influyó y del que todavía me avergüenzo un poco, fue Charles Bukowski. Sí, quiero decir, todos fuimos jóvenes en algún momento y lo leímos y probablemente lo malinterpretamos. No sé para tí, pero para mí, cuando vi el libro El amor es un perro del infierno en una estantería y lo leí, sentí que ese tipo estaba hablándome directamente, sin darme cuenta de que todos los demás hipsters agotados y desaliñados también lo estaban descubriendo. Todavía tengo muchos de sus libros, aunque no tengo algunas de sus primeras obras hechas a mano en Nueva Orleans, sigue teniendo un lugar importante. Cuando era más joven, sentía que él realmente me daba una especie de excusa para ser un desastre, ya sabes, una justificación, eso es. Me dio una justificación para beber demasiado, fumar demasiado, quedarme despierto hasta tarde y tratar a las mujeres como si no fueran personas, ya sabes a lo que me refiero. En realidad, no es una buena influencia, pero sus escritos me atraparon de una manera u otra. Luego están, claro, los escritores beat, como Jack Kerouac, que no era tan completo como Bukowski, pero también tenía sus formas rebeldes. Pero el libro que realmente cambió mi vida y mi perspectiva sobre la escritura fue Cien años de soledad de García Márquez. Ese libro vive en mi alma. Cada pequeña historia en él, el libro en su conjunto, puedo recordar escenas y fragmentos de él en mi mente. García Márquez tenía esa habilidad de escribir una oración que contenía un mundo entero, un universo en sí mismo. Eso es algo que siempre he admirado. El conflicto para mí fue que cuando estudié literatura en la universidad, nos enfocamos principalmente en autores como Yeats, Shelley y Charles Dickens, y no se prestó mucha atención a escritores extranjeros, como García Márquez. Ese libro realmente me impactó, es mi favorito de todos los tiempos.
Cuando vi el libro El amor es un perro del infierno en una estantería y lo leí, sentí que ese tipo estaba hablándome directamente, sin darme cuenta de que todos los demás hipsters agotados y desaliñados también lo estaban descubriendo.
Un poco avergonzado por no poder recordar la pronunciación, le pide a su novia que le repita el nombre del libro que le regaló y reorganiza sus pensamientos: MPH: Siento una extraña fascinación por Pedro Páramo. Aunque inicialmente tuve dificultades para entenderlo y me costó avanzar en la lectura, siento que ese libro me está enseñando a rendirme y no preocuparme tanto por comprender todo de inmediato. Es una relación extraña que tengo con ese libro, pero siento que me está enseñando algo importante.
En cuanto a mi escritura, he publicado dos libros hasta ahora: No voy a salir de aquí (publicado originalmente en español por la editorial Alpha Decay) y The Land of Boredom and Handguns (La tierra del aburrimiento y las pistolas); Sin embargo, no estoy activamente buscando oportunidades de publicación. Prefiero que las cosas fluyan naturalmente y no enfocarme en la venta de mi trabajo. Si las personas encuentran significado en lo que escribo y pueden conectar con mis historias, eso es lo que realmente importa para mí. Mi objetivo es compartir mi arte de una manera que haga que las personas se sientan menos solas en este mundo, incluso por unos momentos. Micah P. Hinson tuvo dos presentaciones en nuestro país: el 23 de octubre en el Foro Independencia en Guadalajara y a la noche siguiente en el Pasagüero en la Ciudad de México. Ambas actuaciones estuvieron acompañadas por Lázaro Cristóbal Comala, un artista que comparte la misma veta creativa y que la última respuesta de esta charla refleja a la perfección.
En última instancia, mi sueño como artista es tocar un papel en hacer que las personas se sientan menos solas y ayudarlas a encontrar un sentido en este mundo, aunque sea por un breve instante. Eso es lo que me motiva a seguir creando música y escribiendo. Micah. P. Hinson